jueves, 4 de octubre de 2007

El PCE forzará unas primarias para elegir al candidato de IU

Marga Sanz se postula como alternativa a Gaspar Llamazares

C. E. C. - Madrid - 02/10/2007, El País

El Partido Comunista de España (PCE) apuntó ayer que presentará a su secretaria general en la Comunidad Valenciana, Marga Sanz, como candidata alternativa a Gaspar Llamazares para optar en nombre de IU a la Presidencia del Gobierno en las próximas elecciones generales de marzo de 2008. El PCE forzará así una consulta a los afiliados para decidir el cabeza de lista, porque los estatutos de IU establecen que, en el caso de haber más de un aspirante, el candidato a presidente se decidirá por primarias entre los más de 50.000 militantes que, oficialmente, tiene Izquierda Unida.


La aludida explicaba ayer la situación a EL PAÍS: "Se está buscando un acuerdo político para encontrar un candidato de consenso, porque Llamazares no cuenta con el respaldo de una parte importante de la federación. Pero si no se logra, el sábado [cuando está convocado el Consejo Político Federal que votará este asunto], muy probablemente se plantearía un candidato alternativo. Parece que uno de los nombres que suscitan consenso es el mío, pero no está completamente cerrado".

En este ambiente de división total, la Presidencia de IU votó anoche llevar al Consejo Político del sábado la candidatura de Gaspar Llamazares, el único que se presentó oficialmente. Hubo 34 votos a favor, 11 en contra y 16 abstenciones. El resultado muestra que el líder tiene la mayoría pero también una cierta contestación interna.

"Servilismo al Gobierno"

Felipe Alcaraz, presidente del PCE, muñidor de la candidatura alternativa y principal rival político de Llamazares, criticó a dirigente de la coalición públicamente porque la "falta de perfil de IU frente a la ola de bipartidismo" y le acusó de ser "parte del problema y no de la solución". Aún así, la decisión de Llamazares de presentar una enmienda de totalidad a los Presupuestos Generales limita las acusaciones de "servilismo al Gobierno" que el PCE ha lanzado en otras ocasiones.

Los estatutos de IU abren la puerta a una situación inédita. Si sólo hay un candidato en el Consejo Político Federal, como ha sucedido desde que la coalición nació, en 1986, este órgano lo vota sin más. Pero si hay una alternativa -que requiere el 25% de avales del Consejo o el 10% de firmas de la militancia- este órgano, según el artículo 51, "organizará la oportuna consulta al conjunto de la afiliación". El líder de IU cuenta con un mayoría entre el 55% y el 60% en el Consejo Político, pero es probable que no pueda impedir la presentación de la alternativa de Sanz.

Esa "oportuna consulta" entre todos los afiliados tiene riesgos políticos, puesto que es mucho más incontrolable que una decisión tomada entre los dirigentes más importantes. Sin embargo, el sector de Llamazares ya dar por hecho que se producirá y confía en salir airoso.

Sus rivales creen que esta consulta demostrará que Llamazares no tiene enfrente sólo a la dirección del PCE, sino a una parte importante de la militancia. A partir de ahora, la pelea se producirá probablemente en la elaboración de los censos para participar en esta consulta y cómo informar a los militantes. Los enemigos de Llamazares controlan las direcciones de las federaciones más relevantes, como la Comunidad Valenciana, Andalucía y Madrid, y desde allí podrían dirigir la ofensiva entre la militancia. Llamazares cuenta con la estructura federal de la organización.

Fuentes de los dos sectores admiten que este proceso, a cinco meses de las elecciones, supondrá un deterioro para la imagen de IU, pero culpan a sus rivales de haber llegado hasta este punto extremo.